Este es un videoensayo de Pau Fernández realizado para la materia Comunicación Global de la Carrera de Comunicación de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México (Primavera 2025, Dr. Eduardo Portas)
Los videojuegos han formado parte esencial de la cultura pop. Pero hay un patrón incómodo: la forma en que se representa a las mujeres. Cuerpos imposibles, ropa ajustada, poses sugerentes. ¿Por qué se sexualiza tanto a las mujeres en los videojuegos? Hoy exploramos el pasado, el presente y la teoría detrás de este fenómeno.
Desde los 80, los videojuegos fueron diseñados para hombres. Y las mujeres, como personajes, servían más como recompensa visual. Lara Croft, Mai Shiranui o Ivy fueron diseñadas para atraer al público masculino.” “Según Baumeister y Vohs, vivimos en una ‘economía sexual’: el sexo tiene más valor para los hombres que para las mujeres. En este sistema, el cuerpo femenino se vuelve mercancía, incluso en los videojuegos.
En 2013, Tomb Raider rediseñó a Lara Croft como una mujer más humana y fuerte. Pero no todos los cambios fueron positivos. En Metroid: Other M, Samus Aran fue retratada como sumisa y emocionalmente dependiente.” “Antaki explica que los medios no solo reflejan la realidad, la moldean. Estas representaciones reafirman que el valor de la mujer está en su cuerpo, no en su agencia.
Muchos hombres, principalmente blancos y heterosexuales, defienden esta sexualización como algo ‘natural’ o ‘nostálgico’. Para ellos, criticarla es un ataque personal.” “En la economía sexual de Baumeister y Vohs, esto se traduce en consumo simbólico del cuerpo femenino: no ven personajes, sino deseos cumplidos.
Para muchas mujeres gamers, esto no es solo un detalle estético. Es una barrera. Desde personajes que no representan hasta acoso constante por opinar diferente.
En México a industria de los videojuegos en México, como en muchos otros lugares, ha estado tradicionalmente dominada por hombres. Sin embargo, en los últimos años, ha habido un crecimiento notable en la participación y representación de las mujeres en este ámbito.
Participación de las Mujeres como Jugadoras.
Aumento de Jugadoras: Cada vez más mujeres en México se identifican como jugadoras de videojuegos. Los juegos móviles, en particular, han atraído a una gran audiencia femenina debido a su accesibilidad y variedad de géneros.
Diversidad de Géneros: Las mujeres en México juegan una amplia gama de videojuegos, desde juegos casuales y de rompecabezas hasta juegos de rol, estrategia y acción.
Comunidades en Línea: Las comunidades en línea y las redes sociales han facilitado que las jugadoras mexicanas se conecten, compartan experiencias y formen grupos de juego.
Estereotipos de Género: Persisten estereotipos que limitan la percepción de las mujeres en los videojuegos, tanto como jugadoras como desarrolladoras.
Acoso y Discriminación: Algunas jugadoras enfrentan acoso y discriminación en línea, lo que puede afectar su experiencia de juego y su participación en la comunidad.
Falta de Representación: La falta de personajes femeninos fuertes y diversos en los videojuegos, así como la escasez de mujeres en roles de liderazgo en la industria, son desafíos importantes.
Iniciativas y Cambios Positivos
Organizaciones y Comunidades: Han surgido organizaciones y comunidades en México que promueven la inclusión y la diversidad en los videojuegos, brindando apoyo y visibilidad a las mujeres en la industria.
Eventos y Conferencias: Se organizan eventos y conferencias que destacan el trabajo de las mujeres en los videojuegos y fomentan la creación de redes y el intercambio de conocimientos.
Desarrollo de Juegos Inclusivos: Algunos estudios de desarrollo de videojuegos en México están trabajando para crear juegos más inclusivos y representativos, con personajes femeninos complejos y narrativas que aborden temas relevantes para las mujeres.
En resumen, la situación de los videojuegos para mujeres en México está evolucionando. Si bien todavía existen desafíos, como los estereotipos de género y la falta de representación, cada vez hay más mujeres participando como jugadoras, desarrolladoras y líderes en la industria. Las iniciativas y comunidades que promueven la inclusión y la diversidad están contribuyendo a un cambio positivo y a un futuro más equitativo para las mujeres en los videojuegos en México.
Algunos estudios intentan avanzar, pero otros esconden la sexualización bajo pretextos como lo ‘vintage’. Mientras los hombres sí cambian, a las mujeres se les congela en el mismo molde.
La sexualización ha cambiado, pero no desaparecido. Está oculta, maquillada de nostalgia. Como dice Antaki, los medios validan ciertas formas de ser, y como señala Bauman, el cuerpo femenino sigue siendo una moneda en circulación.” “La industria no va a cambiar sola. Depende de nosotros nombrar sus errores y proponer nuevas formas de ver y crear personajes.