Este es un trabajo de María Rebollar, Isabel del Valle y Daniel Arellano realizado para la materia Cartografías de la Comunicación III de la Carrera de Comunicación de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México (Otoño 2024, Dr. Eduardo Portas)

Sumario

Este trabajo de investigación estudió el pasado y el presente del Tianguis Cultural del Chopo, uno de los símbolos más icónicos de la contracultura, la vendimia, y la cultura del rock en nuestro país. Una entrevista con el fundador de este espacio, Antonio Pantoja, nos permitió estudiar el objeto desde la perspectiva de alguien que ha vivido todas las etapas del tianguis, su evolución, y las numerosas formas en las que el lugar ha logrado mantenerse relevante a través de cuatro décadas. Al final, se definió la importancia del espacio para el desarrollo de distintas disidencias, el crecimiento de la escena musical en el país, y la forma en la que cambió la vida de coleccionistas, entusiastas del rock en México, y a quienes encontraron en la vendimia del ‘Chopo’, un estilo de vida.

 

Introducción

Los años ochenta en México, significaron una era de prosperidad para la industria musical, particularmente por la gran ola de rock latinoamericano que se había apoderado de las masas. Sin embargo, la adquisición de material nuevo era complicado y caro, por lo que los melómanos recurrieron al intercambio de discos para continuar con el flujo de la música. Fue ahí cuando Antonio Pantoja y su hermano, Javier, convocaron a todos los fanáticos a crear un espacio de intercambio estructurado. Lo que se pensó para un sábado, lleva 44 años creciendo y evolucionando, así bautizado como el Tianguis Cultural del Chopo.

Desde sus inicios, el Chopo se transformó y comenzó a ser adueñado por los comerciantes y visitantes, convirtiéndose en un punto de encuentro para aquellos que buscaban algo más que música: un lugar donde las ideas, las identidades y las subculturas pudieran florecer lejos de las normas establecidas. Con el tiempo, este mercado se convirtió en un espacio icónico para la contracultura en México, albergando a punks, góticos, metaleros y otras tribus urbanas que encontraron en el tianguis un refugio para la expresión libre y la resistencia cultural. Hoy, el Chopo no solo es un mercado de intercambio, sino un símbolo de resiliencia y comunidad, un lugar donde el arte, la música y la cultura alternativa convergen para construir un legado vivo que sigue inspirando a nuevas generaciones.

Nuestro trabajo, «Se vende Rocanrol: La vida de un vendedor en el Tianguis del Chopo» explora la identidad y motivaciones de uno de sus fundadores, así como el impacto cultural de este espacio icónico. A través de una entrevista, se analiza cómo el Chopo ha mantenido su relevancia en un entorno social cambiante.

Objetivos

Creamos tres objetivos para enfocar nuestra investigación y entrevista en nuestras metas grupales e individuales.

1. Comprender la historia detrás de la escena musical en México y entender la importancia sociocultural del espacio, Tianguis Cultural del Chopo, a base de investigaciones, exploración y entrevista.
2. Realizar una entrevista que logre reflejar no solo la vida de nuestro entrevistado, sino que su vida a través del Tianguis Cultural del Chopo y su perspectiva como fundador.
3. Analizar el impacto que nuestro entrevistado, y por lo tanto, el Tianguis Cultural del Chopo tuvieron en la cultura mexicana, reflexionando sobre cómo este espacio así ha evolucionado y permanecido a través de los años.

Preguntas de Investigación

●Objetivos principales
¿Cómo es la vida de un vendedor en el Tianguis Cultural del Chopo?
¿Qué motivaciones, sociales, culturales y políticas, impulsaron la creación del Tianguis Cultural del Chopo?
¿Cómo es la relación entre el Tianguis Cultural del Chopo y su fundador a 44 años de su nacimiento?

●Objetivos secundarios
¿Por qué es importante el Tianguis Cultural del Chopo para la cultura mexicana?
¿Por qué se considera un hogar para las subculturas mexicanas?
¿Cómo ha cambiado este espacio a través de los años?

●Objetivos terciarios
○¿Cómo era la vida mexicana para un melómano en los años ochenta?
○¿Qué subculturas han participado en el Tianguis Cultural del Chopo?
○¿Cuáles son los prejuicios que sufren los asistentes del Tianguis Cultural del Chopo?

Justificación social de la investigación

Existe una relevancia social sobre este proyecto, pues el Tianguis Cultural del Chopo simboliza resiliencia para las subculturas que suelen ser incomprendidas o juzgadas por sus elecciones alternas a las de las normas sociales. La evolución de este espacio lo consolida como un lugar seguro para cualquiera que llegue con una propuesta distinta. Este ha sido percibido como un lugar peligroso, y a pesar de que con los años ha atraído a personas con intenciones maliciosas, el Chopo es un lugar que propone resistencia dentro de las disidencias. Es por esto que los proyectos audiovisuales que le permiten a personas y a espacios contar sus historias desde una perspectiva objetiva son necesarios.

Hipótesis

La existencia de las contraculturas depende de espacios culturales que fomentan y promueven sus actividades. Es por esta relación recíproca entre el tianguis y sus visitantes, que este permanece a través del tiempo.

Metodología

Para obtener una entrevista que enriqueciera la narrativa del proyecto, se eligió un tema que interesara a los integrantes de este equipo, para así sincerar el proceso creativo del proyecto. Como parte de las asignaciones del curso, se realizó un Estado del Arte que unía y contrastaba las perspectivas de distintos autores que habían hecho tésis, proyectos y artículos relacionados directamente con el Tianguis Cultural del Chopo, así como con temas relevantes, como el rock, las subculturas y los espacios alternativos en México. Posteriormente, hicimos una expedición al Chopo para familiarizarnos con el lugar, recopilar contenido para nuestro proyecto audiovisual y seleccionar a un entrevistado. Tras agendar una fecha, realizamos la entrevista, obteniendo el suficiente material visual para apoyar el proyecto final. Este proceso de investigación, exploración y reflexión, fueron los que nos permitieron completar el trabajo audiovisual de manera redonda.

Productos a entregar

La entrega de este proyecto incluyó dos productos principales. El primero fue una entrevista en formato audiovisual, la cual se apoyó de materiales que registramos al explorar el Tianguis Cultural del Chopo, objetos que el mismo entrevistado nos presentó y archivos que recopilamos. El segundo producto es este documento, el cual muestra las diferentes aristas de la investigación, así como un análisis de los resultados obtenidos a partir de la entrevista.

Estado del Arte

El Tianguis Cultural del Chopo, que comenzó en 1980, ha sido un espacio emblemático para la contracultura de la Ciudad de México, por lo que se ha convertido en un punto de encuentro para diversas tribus urbanas y alternativas. Nació como un lugar donde los amantes de la música, particularmente del rock y el punk, intercambiaban discos difíciles de encontrar en otros mercados. Con el paso del tiempo, el tianguis ha crecido no solo en tamaño, sino que también en la variedad de productos que se pueden encontrar: desde ropa, literatura y cine, hasta arte y música en vivo. Este espacio ha mantenido su relevancia debido a su capacidad de adaptarse a las nuevas tendencias musicales, lo cual lo ha llevado a abrir el paraguas de aquellos que lo visitan.

Entre las principales tribus que lo frecuentan se encuentran punks, emos, metaleros, góticos y skaters, quienes ven el Chopo como un lugar donde compartir intereses, expresar sus identidades, conseguir productos únicos y convivir con personas similares a ellos. El impacto cultural del Chopo se extiende más allá de la simple compraventa de objetos; se considera un espacio donde los movimientos sociales alternativos se han apropiado del espacio público y han mantenido viva una zona a base de la resistencia cultural. En este estado del arte se analizarán las investigaciones y tésis sobre el impacto cultural y social del tianguis, su relevancia como fenómeno urbano y su papel como hábitat de subculturas en la Ciudad de México.

En su texto, los rituales del caos, Carlos Monsiváis alude a la lógica de la adaptación cultural dentro de un contexto apretado económicamente: “En buena medida, la crisis económica es la cultura urbana, porque todo lo adapta.” (Monsiváis, 1995, p. 121). En su tésis, Isaac Dolores se extiende al explicar los mercados, en particular el del Chopo como un hábitat.

“En la ciudad todos los sujetos son importantes, ya que estamos ante la gran escena de la misma vida donde todos somos actores sociales y compartimos el mismo escenario, en este caso una «Ciudad».” (Dolores, 2008, p. 19) Por lo que se entiende a los “choperos” (vendedores, músicos y asistentes) como elementos activos en la constante evolución de su ambiente, por tanto de significados y prácticas culturales.

La confrontación entre estos actores y las autoridades ha sido el centro de atención de espacios tales como el Chopo. Castillo, Boudreau y Ávila proponen entender el tianguis como un lugar actual y propositivo de la acción urbana, donde la relación entre transgresión y regulación no se reduce a una confrontación, sino que revela que hay proceso complejo de interacción que lo alimenta. “En otras palabras, los lugares son una forma emergente y constructiva de la acción urbana. Por eso debemos superar la mirada dicotómica de confrontación entre choperos y autoridades, y enfocarnos en las múltiples escalas temporales y espaciales que revelan cómo se construye el lugar, a través de la relación entre transgresión y regulación.” (Castillo, Boudreau, Ávila, 2020, P. 562-563) Esto permite entender cómo el lugar se construye y reconstruye a través de múltiples escalas temporales y espaciales.

Lo disruptivo, lo rebelde y lo punk, usualmente coexisten con la juventud, tal como diría Allende, y así mismo lo defiende y lo destaca Sara Vanessa Morales en su análisis:

 

Ser joven, por lo tanto, no depende sólo de la edad como característica biológica. Tampoco depende solamente del sector social a que se pertenece. Hay que considerar también el hecho generacional como la incorporación de códigos diferentes en el percibir, apreciar y actuar. La categoría «juventud» , así definida como franja de edad acotada en relación al concepto biológico, sociocultural y generacional, no es representativa de la totalidad de aquellos que se implican y, consecuentemente, mucho menos homogénea. (Morales, 2009, p.43)

Continúa vinculando la juventud con el punk:

Con esto se hace referencia al constante devenir llevado a cabo en un espacio y tiempo determinado, que a la vez configura variantes formas de actores sociales, sólo que en ocasiones o en esos momentos coyunturales en los que toca actuar, y más allá de esto, redefinirse las formas de ser y estar de los sujetos, ocurre que acontecen los fenómenos sociales inconformes o que quedan fuera de dicho proyecto, como es el caso de la modernidad como un proyecto de vida que no ha funcionado del todo ni para todos. Es decir, que aparecen las sociedades modernas con ideales nuevos que a la larga desilusionan a sus participantes. El punk se puede definir como una resultante lógica de la modernidad. La industrialización o modernización; consecuencia del sistema económico capitalista actual, se ha estructurado como un núcleo paradójico y dialéctico que al mismo tiempo dio origen al punk que postulaba la necesidad de destruir para construir. (Morales, 2009 , p.34)

Los jóvenes que participan en este espacio no pueden ser categorizados bajo un estereotipo, ya que el tianguis es hogar de múltiples expresiones y subculturas que desafían la idea de una juventud homogénea. En el Chopo, conviven distintos grupos que, aunque comparten ciertos intereses, viven sus experiencias desde perspectivas generacionales diversas, marcadas por las mismas que han pasado por donde ellos ahora comercian, lo cual los vuelve a unir a pesar de sus diferencias.

En el Tianguis Cultural del Chopo, la música ha sido un eje central en la construcción de identidades colectivas y personales, de aquellos que deambulan por el espacio. Según su escrito, David García argumenta, “dentro de un esquema del proceso de producción de la música rock, en donde las primeras etapas son la creación, la producción, la distribución y la transmisión, es en el momento de la apreciación y consumo en donde existe una negociación de sentidos y significados; es en esta etapa donde el género musical funge como un fenómeno cultural que puede configurar identidades y universos de valores en prácticas de consumo individuales o grupales.” (García, 2006, En el contexto del Chopo, este fenómeno cultural ha sido fundamental para la configuración de identidades y universos de valores entre aquellos que acuden al tianguis, ya sea como individuos o como parte de grupos que comparten afinidades subculturales.

Marco teórico

Datos biográficos del autor

Lance Strate nació en Estados Unidos el 17 de septiembre de 1957 y se convirtió en un destacado teórico en el campo de la comunicación y los estudios de medios. Comenzó sus estudios en Cornell University, después consiguió un masters de comunicación en Queens College y finalmente hizo un Ph. D centrado en ecología de los medios en la New York University. Precisamente, Strate es mayormente conocido por su trabajo en la teoría de la ecología de los medios, el cual estudia la relación entre los medios y el ser humano, el cómo se afectan entre sí, para convertirse en un ambiente que se alimenta de sus mismos componentes, los cuales evolucionan simultáneamente.

Tras conseguir su doctorado, comenzó a ser profesor en la Universidad de Fordham, donde ha impartido clases y realizado investigaciones sobre temas relacionados con la teoría de los medios, la comunicación simbólica y los impactos sociales de los avances tecnológicos. A lo largo de su carrera, Lance Strate ha escrito varios libros influyentes, entre ellos “Echoes and Reflections: On Media Ecology as a Field of Study”, “Amazing Ourselves to Death: Neil Postman’s Brave New World Revisited” y “Taking Up McLuhan’s Cause: Perspectives on Media and Formal Causality”, los cuales influenciaron Además de su labor académica, Strate ha sido un participante activo en conferencias internacionales y ha contribuido con artículos en diversas publicaciones académicas y medios de divulgación.

Principales conceptos teóricos

Concepto	definición textual	Fuente
Ecología de los medios	”La ecología de los medios puede sintetizarse en una idea básica: las tecnologías – en este caso, las tecnologías de la comunicación, desde la escritura hasta los medios digitales— generan ambientes que afectan a los sujetos que las utilizan.”	Scolari, C. S., Elizondo, J. o. E. M., Gencarelli, T. G.,    Ibrus,    I.    I.,Levinson, P. L., Logan,      R.      L.,Mazorra,    D.    M.,Postman,    N.    P.,Reno, D. R., Roncallo, S. R., & Strate, L. S. (2015).Ecología    de    los

		medios: entornos, evoluciones e interpretaciones.29. Gedisa Editorial.  https://repositori.upf.edu/bit stream/handle/10230/45919/Scolari_Ecologia_medios.pdf?sequence=1&isAllowed=y
El medio como entorno	”La idea de que los medios constituyen entornos invisibles es en parte un modo de percepción y atención. Cuando un medio es nuevo, se nos hace brevemente visible y nos maravillamos ante la novedad de la innovación. Mientras nosacostumbramos a él y el uso de la tecnología se vuelve rutinario, dejamos de prestarle atención, pasa a formar parte de la rutina y nos volvemos funcionalmente ciegos a ello.”	Strate, L. S. (2012).El medio y el mensaje de McLuhan.Infoamérica ICR, 7-8, 74. https://www.infoamerica.org/icr/n07_08/strate.pdf
El medio es el mensaje	”el usuario es el contenido. Desde el punto de vista de	Strate, L. S. (2012).El medio y el

la comunicación, el usuario se refiere al emisor y al receptor. Mientras los modelos de comunicación tienden a separar al emisor del mensaje, en realidad son inseparables, el mensaje está íntimamente conectado al emisor.”

mensaje de McLuhan.Infoamérica ICR, 7-8, 71. https://www.infoamerica.org/icr/n07_08/strate.pdf

Relación con el objeto de estudio

El Tianguis Cultural del Chopo es un espacio donde la convergencia de la música, la cultura alternativa y el comercio se entrelazan, creando un ambiente de convivencia autosustentada por las mismas personas que acuden al lugar.

Desde la perspectiva de la ecología de los medios, podemos entender cómo este tianguis ha sido transformado por las facilidades de comunicación a lo largo del tiempo. En sus inicios, la difusión del Chopo dependía de medios físicos como volantes y carteles, mientras que hoy en día las redes sociales y las plataformas digitales se han convertido en los canales predominantes. Estas tecnologías no solo permiten la promoción, sino que crean un ambiente comunicacional de difusión que moldea la experiencia misma del tianguis, influyendo tanto en los vendedores como en los compradores. En este sentido, los medios han generado un nuevo entorno cultural que afecta las dinámicas dentro del espacio.

A medida que estas tecnologías se vuelven rutinarias, dejan de ser visibles y pasan a formar parte del entorno cotidiano del Chopo. Este es un ejemplo claro de cómo los medios, inicialmente innovadores, se vuelven o hacemos que se vuelvan entornos no percibibles. Los participantes utilizan redes sociales para promocionar productos y eventos sin reflexionar sobre cómo estas herramientas están transformando las relaciones dentro del tianguis. Esto ha llevado a un nuevo flujo de personas que acuden al lugar, haciendo que evolucione y mute conforme a sus locales. La publicidad y la interacción digital ya no son algo novedoso, sino una parte indispensable de la rutina que estructura el día a día del Chopo.

Otro concepto relevante es que el usuario es el contenido. En el caso del Chopo, los vendedores, músicos y asistentes no son solo usuarios de las tecnologías de comunicación, sino que también generan la experiencia cultural del tianguis. Los participantes se convierten en parte del contenido cultural que otros consumen. La manera en que las personas se representan a sí mismas y sus productos es, en sí misma, un mensaje cultural que refuerza la identidad alternativa y contracultural del Chopo.

Finalmente, el mensaje y el emisor son inseparables. En el Chopo, la cultura y los productos que se comercializan están íntimamente conectados con la identidad de quienes participan en el tianguis. El mensaje contracultural que este espacio transmite no puede separarse de los individuos que lo habitan. Las personas que asisten al Chopo no sólo consumen, sino que también contribuyen activamente a la construcción de su significado cultural. En este sentido, el tianguis es más que un mercado; es un espacio donde la identidad del emisor define el mensaje, y ambos son parte de una experiencia integral.

Principales líneas discursivas del entrevistado

Concepto

Definición

Interpretación

Tianguis Cultural del Chopo para el creador	“Es un paraíso, es un paraíso musical y te digo que no, nada más de discos, no playeras, botones este. De de todo, no, entonces para mí es el paraíso terrenal. Musical.”	Antonio Pantoja percibe el tianguis como un lugar de disfrute, aún a 44 años desde su inicio, y a pesar de su evolución.
Estado actual del rock	“No, para nada, no, pues vean a caifanes, Café Tacuba. ¿Cuántos años tienen juntos? O sea, no, realmente el Rock nunca va a morir, eh, no, no creo, no creo, se reinventan, pero no, no va a morir.”	Él mantiene una postura positiva conforme al estado actual de la música, a pesar de que es común encontrarse en desencanto con la escena actual, en especial para personas que vivieron la ola del rock en su mejor momento.
Perspectiva de la evolución del Tianguis Cultural del Chopo	“¿Qué tianguis dura 40 años con lo mismo?, entonces realmentetenemos que ser tolerantes en ese sentido¿No? Qué bueno que el papá vaya por un disco, la mamá por un pantalón, el niño por una playera, la niña por unos tenis, pues hay que verlo por el lado positivo,    ¿no?    ya    los	Antonio no siente indignación al ver la transformación que sufrió el Chopo tras tantos años. Pantoja promueve la asistencia de familias y comparte la posibilidad de todo tipo de disfrute.

	tiempos han   cambiado,¿no? entonces es muy padre para mí, que a 44 años ya vemos familias enteras, las nuevas generaciones, que van a llegan a mi puesto a preguntarme un chavito por discos de los Beatles, les digo, Oye, pues estás muy chavo, ¿cómo los conoces?, ¿no? ¿Pues es que mi papá en la casa escucha esto y ahora me trae, le digo, pues qué padre, ¿no? qué padre que los papás ahora lleven a sus hijos, a las nuevas generaciones, a conocer el chopo y todo el material que hay.”
Colección personal	“Entonces, y yo soy de la idea de que tenemos que enseñar lo que tenemos. Bueno, yo personalmente. Me gusta mucho compartir todo lo que tengo, mi memorabilia que tengo, mi colección. Entonces yo creo que eso es bien	Él tiene una colección personal extensa y elige compartir sus objetos con sus amigos y seguidores porque es un principio que él mantiene.

	importante, ¿no? ¿Que la gente pues presuma sus cosas, ¿no? O sea, yo sí presumo mis cosas y pues accedí a que ustedes vinieran porque me dieron mucha confianza y pues aquí estamos, este… compartiendo.”
Relación entre jóvenes y el Tianguis Cultural del Chopo	“Más que nada para los jóvenes ¿no?, es el lugar, es un lugar de jóvenes y Claro que, pues va mucha gente    adulta    también,¿no? pero creo que eso esbien importante, que por eso ha durado tantos años porque ha sido un lugar de reunión. Principalmente de jóvenes. Entonces por eso yo creo que nadie los va a dejar morir.”	Los jóvenes son los que promueven la existencia del Chopo. El tianguis permanece por la rotación de personajes que asisten y asistiran a este, en su mayoría, jóvenes.

Interpretación de Resultados

El Tianguis Cultural del Chopo, fundado en 1980, es mucho más que un simple mercado. Este espacio, ubicado en el corazón de la Ciudad de México, se ha convertido en un referente para la contracultura y la música, un lugar donde se entrelazan las historias y los sueños de quienes buscan en la música una forma de expresión y resistencia. Es un lugar donde las subculturas y el comercio no sólo conviven, sino que generan las condiciones perfectas para la constante evolución de las culturas alternativas en México, tal como un hábitat. Lo que comenzó como un encuentro temporal para coleccionistas y melómanos se transformó en un espacio donde las subculturas no solo conviven, sino que encuentran un terreno fértil para florecer y reinventarse.

Uno de los factores clave detrás de la permanencia del Chopo es la activa participación de sus asistentes. Este lugar trasciende lo comercial, pues lo que lo define no es solo lo que se vende o se compra, sino las personas que lo habitan. Los vendedores, músicos y visitantes no son simples espectadores; ellos son la experiencia del Chopo. Desde la ropa que usan, la música que comparten, hasta las historias que intercambian, cada detalle refuerza la identidad del Chopo como un símbolo vivo de contracultura. Es un lugar donde, más que consumir, se experimenta y se vive.

Desde sus inicios, el Chopo ha sido un espacio incluyente y abierto a todas las expresiones. Aunque en sus primeras convocatorias se incluyeron géneros musicales variados, fue el rock el que encontró en este espacio su casa. Antonio Pantoja, el co- fundador, recuerda que su pasión por la música nació en un hogar lleno de melodías, lo que lo llevó a imaginar un lugar donde los jóvenes pudieran intercambiar discos. Según Antonio, el Chopo se transformó en un motor fundamental para la difusión del rock mexicano, y eventualmente también comenzó a ofrecer una plataforma para bandas emergentes que no encontraban apoyo en las grandes disqueras. Este espacio, desde entonces, ha sido un refugio para quienes se encuentran bajo las disidencias o bajo el ojo juzgón de la sociedad mexicana.

La flexibilidad y capacidad del Chopo para adaptarse a los tiempos son elementos esenciales de su éxito. Antonio destaca que las juventudes han sido el alma que lo mantiene vigente. Aunque la idea inicial era que funcionara solo durante cuatro sábados en 1980, el entusiasmo y la participación constante de nuevas generaciones lo transformaron en un fenómeno cultural que ha perdurado. “¿Qué tianguis dura 40 años con lo mismo?”, señala Antonio. Esta apertura ha permitido que el Chopo no solo se mantenga relevante, sino que siga siendo un lugar donde confluyen personas de todas las edades, cada una aportando algo único.

Más allá de su función como mercado, el Chopo tiene un impacto cultural profundo. Durante décadas, ha sido una plataforma para el rock mexicano y las propuestas independientes. Muchas bandas que hoy son emblemáticas, alguna vez, tocaron frente a la audiencia del tianguis, aquellos que buscaban sonidos diferentes, lejos de lo que ofrecía la industria musical tradicional. Este espacio no solo permitió que esas bandas encontraran público, sino que ayudó a consolidar un movimiento musical que continúa influyendo en generaciones actuales. Antonio exige que se reconozca el papel del Chopo en la historia cultural del país.

“Yo le digo a los jóvenes, el que no conoce el Chopo, no conoce México”, afirmó Antonio con orgullo. Y no es para menos, como ya se mencionó antes, el Chopo es más que un mercado. Es un testimonio de cómo las comunidades pueden sostener espacios que trascienden el tiempo, alimentados por la pasión, la creatividad y la voluntad de resistir frente a un mundo que cambia rápidamente.

En un momento donde las ventas digitales dominan, el Chopo ofrece algo que no se encuentra en línea: la interacción humana. Es un lugar donde la gente conecta cara a cara, comparte recomendaciones de música, descubre rarezas y escucha bandas en vivo. La energía que se vive cada sábado no se puede replicar en ninguna otra parte. Es un recordatorio de que la cultura no solo se consume, sino que también se crea, y en el Chopo, esa creación ocurre de manera colectiva y espontánea.

A lo largo de sus 44 años, el Tianguis Cultural del Chopo ha sido un espacio fundamental para la expresión artística y la resistencia cultural. En sus calles se entretejen historias de generaciones pasadas con las visiones de las futuras, demostrando que la cultura es un proceso vivo y en constante cambio. En el Chopo, la contracultura no solo sobrevive, sino que se renueva cada semana, reafirmando su papel como un fenómeno cultural indispensable en la Ciudad de México.

La entrevista nos permitió conocer el punto de vista de Antonio sobre las circunstancias que lo hicieron amar la música desde edad muy temprana, que empezara a tener una pasión por coleccionarla, que lo llevaron a tener la idea de crear un espacio como lo que hoy representa el tianguis cultural del chopo. Antonio nos cuenta que él estuvo rodeado de la música desde edad muy temprana ya que tanto su padre como sus hermanos eran músicos, por lo cual parecía natural que él desarrollará una pasión por esta forma de arte.

Según comentó en la entrevista, él no alcanzó a vivir la época de represión que se vivió previo a la fundación del tianguis del chopo en cuanto a la música rock; sin embargo es importante mencionar que este tipo de prohibiciones jugaron un rol muy importante de forma indirecta en el eventual éxito del tianguis, debido a que en México existía un hambre por explorar todos los discos, grupos y canciones que sólo llegaban a los oídos de los pocos valientes que se atrevieron a desafiar a la ley para escuchar rugir una guitarra.

Comenta que cuando le empezó a surgir el gusto por coleccionar música, aunque sí existían tienda de discos, no existía un espacio en el que aquellos coleccionistas ávidos pudieran establecerse, y compartir sus conocimientos con otras personas que tenían el mismo interés. Así mismo, Antonio hizo mucho énfasis en que el tianguis cultural del chopo siempre estuvo pensado para que fueran los jóvenes quienes acudieran a vender, comprar e intercambiar productos relacionados a todo tipo de música. Es importante recalcar que en un inicio la convocatoria se hizo a todos los géneros. Sin embargo, fueron quienes eran afines al rock los que se establecieron e hicieron del chopo su lugar de reunión por excelencia.

Antonio nos hizo mucho hincapié en el papel de las juventudes para que naciera el Chopo, y para que pueda seguir relevante aún a más de cuatro décadas de su fundación. Un evento que estaba únicamente planeado para los cuatro sábados de octubre de 1980, ha sobrevivido a generaciones enteras gracias a (según Antonio), la constante presencia de las juventudes, que siguen interesándose en todo lo que ofrece el tianguis en cuanto a productos y el ambiente general que se vive en él, aun cuando pareciera estar dirigido a las generaciones que vivieron su juventud hace ya décadas, lo cual lo convierte en un suceso social interesante de analizar.

En cuanto a la música, Antonio nos insistió en darle su lugar al Chopo como una de las herramientas clave para el crecimiento de la escena de Rock mexicano, debido a que fue uno de los espacios en los que aquellos grupos musicales que no habían logrado conseguir contratos con disqueras, podían dar a conocer su trabajo, y distribuirlo de forma orgánica hacia un público que pudiera mostrar un interés genuino en su trabajo. Con el tiempo, algunos de estos grupos irían ganando relevancia, y no olvidarían al chopo como uno de sus principales apoyos. Sin embargo, Toño si nos expresó su inconformidad con la aparente ausencia del tianguis a la hora de relatar la historia del rock y de la música y México.

“Pues claro que sí, yo siento que yo no voy a decir que fue el lugar más importante, pero sí creo que fue muy punto clave en esto de la música en México. Es bien importante y pues al grado de que ve, mira, ¿no? acaba de cumplir 44 años. Entonces imagínate si no es bien importante para la Ciudad de México, no, yo les digo que los adultos decían mucho una frase que el que no conocía el salón Los Ángeles, no conocía México, yo les digo, ahora a los jóvenes, ¿no? Pues el que no conocía el chopo, pues no conoce México.”

Por otro lado, Antonio se presentó a si mismo abierto y orgulloso de todos los cambios que ha presentado el ‘Chopo’ desde su fundación, Nos remarcó que, al ser el fundador, le han tocado todas las épocas que ha vivido el Chopo, y que él siempre lo ha recordado como un lugar tolerante para todas las expresiones, por lo que no siente que esa tolerancia deba de cambiar en cuanto a los productos que se venden en el Chopo, o los motivos por los que la gente acude a él.
Mucha gente nos ha criticado. No es que el tianguis es un tianguis de ropa que no sé qué. Yo les digo, no, amigos no. Ya son otros tiempos, ¿no? ¿Qué tianguis dura 40 años con lo mismo?, entonces realmente tenemos que ser tolerantes en ese sentido ¿No? Qué bueno que el papá vaya por un disco, la mamá por un pantalón, el niño por una playera, la niña por unos tenis, pues hay que verlo por el lado positivo, ¿no? ya los tiempos han cambiado.

A su vez, se mostró optimista sobre el futuro del tianguis, y parecía orgulloso de que el mismo haya logrado sobrevivir a la pandemia, e insistió que la relevancia del tianguis reside en que la gente ha seguido asistiendo, y quienes fueron al tianguis en sus primeras épocas, han empezado a llevar a sus familias, que debido a la diversificación que ha tenido el lugar en cuanto a los productos que ofrece, van encontrando interés en visitarlo.

Si revisamos lo dicho por Maffesoli en El Tiempo de las Tribus (2004) con la experiencia del Sr. Pantoja, y la historia que nos cuenta al respecto del ‘Chopo’, podemos contrastarlo y encontraremos algunas similitudes y diferencias entre las hipótesis y conceptos establecidos por el autor, y el ejemplo práctico del tianguis.

La primera diferencia encontrada entre lo establecido en el texto y la historia del tianguis es que Maffesoli considera que las tribus urbanas y los espacios que establecen tienen una naturaleza efímera, ya que la tendencia es que esta se conjunte en torno a símbolos o prácticas culturales que tienden a desaparecer con el tiempo. Esto contrasta fuertemente con lo que sabemos del ‘Chopo’, porque, aunque sí cumple con el hecho de reunirse en torno a símbolos o prácticas culturales (la música), es un hecho que ha logrado mantenerse relevante por varias generaciones, probablemente debido al sentido de comunidad que se ha desarrollado dentro de él, y a los diversos nichos cuyas demandas son cubiertas dentro de él.

Por otro lado, el texto de Maffesoli plantea que usualmente las tribus urbanas coexisten sin convivir entre ellas, cosa que en el Chopo sucede todo el tiempo, ya que conviven tribus como los ‘Emos’, los ‘Punks’, y los ‘Skatos’. La convivencia de todas estas tribus urbanas ejemplifica otro concepto establecido dentro del texto de Maffesoli, que es la resistencia social ante la norma, siendo que todas estas tribus urbanas comparten características que los hacen sobresalir de la norma, y no necesariamente ‘encajar’ dentro de la sociedad, por lo que decidieron construir un espacio tolerante dentro del tianguis, unidos por la música y el deseo de tener un lugar donde ser diferente no tuviera un impacto negativo en sus vidas, lo contrario, los accesorios, los tatuajes, los peinados, y la estética son una herramienta que se utiliza para crear comunidad, como planteó el autor en el texto.

Finalmente, podemos concluir que el ‘Chopo’ es una respuesta a la crisis que han vivido las identidades tradicionales durante las pasadas décadas según El Tiempo de las Tribus, por lo que han priorizado encontrar nuevas formas de pertenecer y crear comunidad.

Conclusión

Este proyecto destaca la importancia de ofrecer una escucha a aquellos que han sido reprimidos por las normas sociales, ya que siempre hay algo que decir. La entrevista le otorgó el micrófono a Antonio, quien habló desde un lugar de amor, acerca de un espacio que nació desde el hambre insaciable por conocimiento cultural que comparten los melómanos y los coleccionistas en general. El Chopo permanece y permanecerá, siempre y cuando la gente se permita ser sí misma.

Referencias

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Dolores, I. (2008) La apropiación del espacio público: El tianguis cultural del chopo. http://132.248.9.195/ptd2008/septiembre/0632554/0632554_A1.pdf

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Monsiváis, C. (1995). Los rituales del caos (2006.). Ediciones Era.

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Scolari, C. S., Elizondo, J. o. E. M., Gencarelli, T. G., Ibrus, I. I., Levinson, P. L., Logan, R. L., Mazorra, D. M., Postman, N. P., Reno, D. R., Roncallo, S. R., & Strate, L. S. (2015). Ecología de los medios: entornos, evoluciones e interpretaciones. 29. Gedisa Editorial. https://repositori.upf.edu/bitstream/handle/10230/45919/Scolari_Ecologia_me dios.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Strate, L. S. (2012). El medio y el mensaje de McLuhan. Infoamérica ICR, 7-8,

Haz clic para acceder a strate.pdf

Transcripción de la entrevista

Ok, pues, ¿quieres presentarte?

Hola, soy Toño Pantoja. Y estamos aquí, en mi casa museo.

¿Cuál es tu nombre?

José Antonio Pantoja Gómez.

¿Cuál es tu edad?

66 años.

¿A qué te dedicas?

Yo soy jubilado, ya tengo 13 años de jubilado, trabajaba en la unam.

¿Y ahora vendes?

Sí, soy vendedor actualmente en el Chopo.

¿Y tu estado civil?

Casado.

¿Dónde, dónde naciste y dónde creciste?

Crecí aquí en la Ciudad de México, aquí en esta casa nací. De mi casa, de mis papás, sí.
OK, este… cuéntanos un poquito de cómo empezó tu interés en la música.

Pues principalmente por mi papá, mi papá era percusionista de la banda de sinfónica de la SEP, de la banda de del ejército y también tocaba en la plaza, en la banda de toros de la Plaza México. Entonces yo creo que de ahí me viene el gusto por la música, porque mi papá principalmente era músico, entonces ahí me nació el gusto por la música.

OK. ¿Y cómo empezó la idea del Chopo? O sea, nos cuentas que fue con tu hermano, entonces supongo que entre los 2.

Sí, sí, realmente, pues es que yo como coleccionista, pues no, no encontraba muchos lugares para comprar discos, no, sí, había tiendas de discos, pero yo iba a tepito a comprar mis discos, entonces de ahí me nació la idea de que le dije a mi hermano, mi hermano era el coordinador de actividades culturales en el Museo del Chopo y le le comenté, oye, ¿por qué no hacemos un lugar de reunión donde los chavos puedan juntarse para vender, comprar? Y una idea que tuvimos fue la del intercambio, que creo que hasta la fecha 44 años, pues sigue lo del intercambio de discos. Entonces ahí mi hermano este le dijo a su jefa que era. La escritora Ángeles Mastretta era la directora, le contó la idea que teníamos y ángeles dijo adelante y el 04/10/1980 empezó el tianguis de la música que se llamaba, y años después se iba a convertir en el tianguis del Chopo.

¿Y cómo fueron esos primeros años del chopo?

Pues estuvo planeado para cuatro sábados y debido al éxito, pues se siguió otros cuatro y otros cuatro sábados. Se convocó a compañías independientes. Revistas y había como 20 vendedores, Se hizo una convocatoria a los medios y fue llegando la gente. Entonces yo creo que se hizo más famoso, como que, de boca en boca, porque fueron diciendo eso, hay tianguis de de discos.

Y de la nada nació esta onda de los ‘toquines’ ¿no? porque también es muy famoso el Chopo por eso

Bueno, en el chopo no nada más empezamos con el tianguis, sino que también tocaron varios grupos ahí y aparte también poníamos audio todos los sábados, poníamos un audio y también tocaban grupos. Entonces pues se conjuntaba todo.

¿Como qué grupos? Yo sé que muchos grupos empezaron a tocar en el Chopo

Tanto como que empezaron, no, bueno, es que aparte hicimos un concurso de rock y ahí sí se inscribieron como 50 grupos, ¿no? entonces pues muchos grupos empezaron ahí. Chaac Mool fue uno de los que empezaron a tocar ahí en el Chopo. Y otros más. Pero te digo, no, no, no tanto que haya nacido ahí en el museo, sino que nosotros les dimos difusión a los grupos a que tocaron ahí en el Museo del Chopo.

¿Qué tipo de personas fueron como las primeras en empezar a sentirse como seguros en este, pues en este tianguis?

Pues, es que, la mayoría éramos coleccionistas y también empezaron a llegar músicos. Walter Smith, este el capitán Piyama Jesús Martínez. Entonces, de alguna manera, ellos contribuyeron mucho al Tianguis. Porque estaban como adelantados a nosotros. Ellos están adelantados ahí en cuestión de música. Sí, entonces llevaban discos que nosotros no habíamos visto. Entonces yo siempre lo he dicho así, ellos estaban adelantados a todos nosotros, pues cuando llegaban ellos a vender sus discos, pues estábamos todos como avispas ahí. Ellos ayudaron mucho a la difusión, principalmente del rock mexicano, porque hubo rock también ‘gabacho’ que le decimos ¿no? Pero ellos ayudaron mucho a la difusión del mexicano con todo su material que llevaban, y los vendedores que iban cada 8 días a vender sus discos.

Ok, y también ellos, pues como promocionaban sus… bueno, no sé si era la época, pero ¿ellos grababan sus propios discos? ¿su propia música?

No, sí, pues eran independientes, y aparte, pues también grababan con compañías
¿no?, y la convocatoria fue para todos los géneros. había blues, jazz, rock, pero con el tiempo como que fue predominando el rock y se fueron alejando los otros géneros. Entonces se quedó principalmente el rock en el chopo.

Ok, y ¿cómo fue evolucionando el chopo ante tus ojos?

Pues muy padre, porque te digo que la convocatoria fue como de boca en boca, y fue creciendo, fue creciendo mucho, al grado de que, pues ya había mucha gente adentro del museo, entonces luego estaban alrededor, entonces ya salían, entraban, salían… Entonces sí fue creciendo mucho el tianguis y pues estuvo casi año y medio, casi 2 años adentro del Museo.

Ok y, pues… ¿tú dirías que tu vida se ha desarrollado, pues alrededor de este tianguis? O sea, tu vida cambió drásticamente. ¿Nos podrías contar un poco de tu vida en general y tu día a día como vendedor?

Sí, Claro que sí, cambió mucho, porque te digo que yo iba a la Lagunilla, a Tepito, a Satélite a buscar discos, ¿no? Entonces haz de cuenta que de repente, de la noche a la mañana ya en el chopo llegaba todo tipo de material ¿no? Entonces, claro que nos cambió la vida a todos los coleccionistas de discos que andábamos buscando el material por toda la ciudad. Entonces Claro que nos cambió la vida a todos, a todos los coleccionistas.

¿Qué papel crees que tuvo el chopo en esta explosión que vivió el rock mexicano? Por ahí de los setenta, Ochentas, Noventas, que salieron como muchísimos grupos y que sabemos que la difusión también fue clave.

Pues sí, yo creo que también digo, muchos hablan de rocotitlán, que casi casi fue la cuna del rock. No, no es cierto, el Chopo empezó 5 años antes. Entonces te digo, fue bien importante, pues eso es lo que yo quisiera que dar énfasis en que le den su lugar al Museo del Chopo como lugar de tocadas. Porque empezaron 5 años antes que rocotitlán y que en muchos lados. Entonces, Claro que sí fue bien importante el Museo del Chopo para la difusión de del Rock mexicano antes de Rock en tu Idioma y todo eso. No fue bien importante el Museo del Chopo para los Grupos.

¿Y cómo fue vivir esta época difícil para el Rock en español? porque desde antes de Avándaro, hubo una época de represión en general en Latinoamérica, ¿cómo fue vivir esto de no ser aceptado por el tipo de música que te gustaba escuchar?

Ya para los ochentas ya no había tanto problema, el problema fue después de Avándaro que hubo un poco de prohibición y represión de alguna manera, pero ya en los ochentas no creo que hubiera tanto problema, Inclusive rock en tu idioma, pues todas las compañías los apoyaban entonces realmente creo que los ochentas fue lo mejor para rock mexicano.

¿A ti te tocó un poco de esa represión? ¿Antes de que naciera el Chopo te tocó vivir parte de eso?

No, realmente no, yo no fui a Avándaro, yo estaba chavo, todavía no fui, mi hermano mayor sí fue, pero este… no, pues realmente yo iba a las tocadas y pues sí, muchos amigos dicen no, pues es que la ‘tira’ le llamaban la ‘tira’ que nos agarraban, que nos que nos cortaban el pelo, pues realmente a mí nunca me tocó eso. No sé si por el tipo de amigos que me juntaba, pero no, no, yo realmente no viví la represión ni nada de eso.

¿Entonces tú cómo consideras al Chopo? O sea ¿Crees que sí es clave para el desarrollo que ha tenido la música en México?

Pues Claro que sí, yo siento que yo no voy a decir que fue el lugar más importante, pero sí creo que fue muy punto clave en esto de la música en México. Es bien importante y pues al grado de que ve, mira, no, acaba de cumplir 44 años. Entonces imagínate si no es bien importante para la Ciudad de México, no, yo les digo que los adultos decían mucho una frase que el que no conocía el salón Los Ángeles, no conocía México, yo les digo, ahora a los jóvenes, ¿no? Pues el que no conocía el chopo, pues no conoce México

Antes, por ejemplo, yo cuando estaba chiquito, yo siempre he sido muy fanático también del rock. Entonces yo cuando estaba chiquito le decía a mi papá, oye, vamos al chopo, y me decía, Ay, no, es que es medio pesado el ambiente, no sé qué. ¿Qué prejuicios crees que tenía la gente en su momento sobre el chopo? ¿Y cómo has visto que han cambiado estos prejuicios?

Yo creo que yo creo que era más bien por los ‘Punks’, porque yo me acuerdo de que te digo de también había amigos que sus papás no los dejaban, pero decían se espantaba por los punks, pero realmente los ‘Punks’ eran muy tranquilos, o sea, no, nunca hubo problemas con ellos, ¿no? Y el chopo, como es muy tolerante para todas las manifestaciones y tribus urbanas, que ahora les llaman. Pero, este… por eso nunca hubo problema, no, pero yo creo que era, era eso. Se espantaban con los ‘Punks’ porque pensaban que les iban a hacer algo, pero no, no, el Chopo ha sido muy un espacio muy tolerante para para toda la gente.

¿Y qué te hace sentir ahora ver ya, o sea, después de toda esa época donde la gente no iba, que le daba miedo, ahora ya van familias completas ya? entonces ¿cómo te sientes al respecto?

Sí, ah, pues sí. Respecto a ese tema, exactamente el tianguis del chopo, empezamos casi puros hombres. Sí, con el tiempo fueron llegando las mujeres y ahora exactamente como dices, ahora vemos familias, mucha gente nos ha criticado. No es que el tianguis es un tianguis de ropa que no sé qué. Yo les digo, no, amigos no. Ya son otros tiempos, ¿no? ¿Qué tianguis dura 40 años con lo mismo?, entonces realmente tenemos que ser tolerantes en ese sentido ¿No? Qué bueno que el papá vaya por un disco, la mamá por un pantalón, el niño por una playera, la niña por unos tenis, pues hay que verlo por el lado positivo, ¿no? ya los tiempos han cambiado, ¿no? entonces es muy padre para mí, que a 44 años ya vemos familias enteras, las nuevas generaciones, que van a llegan a mi puesto a preguntarme un chavito por discos de los Beatles, les digo, Oye, pues estás muy chavo, ¿cómo los conoces?, ¿no? ¿Pues es que mi papá en la casa escucha esto y ahora me trae, le digo, pues qué padre, ¿no? qué padre que los papás ahora lleven a sus hijos, a las nuevas generaciones, a conocer el chopo y todo el material que hay.

Pues… ya esto es un poquito más de ejemplos, pero ¿crees que no podrías dar como ejemplos de las subculturas que han llegado a lo largo de los años? Porque yo sé que empezó como rock, blues, jazz, como mencionabas, y de la nada ya fue como metal, punk, etc.

Se considera como más como es que se abrió el panorama a a todos los géneros,
¿no? O sea, se volvió a abrir porque te digo que se cerró un poco con el rock, pero ahorita como que se volvió a abrir a a todos los géneros. Que como ustedes pueden ver ahí en el chopo con el puesto de playeras, ahí también pueden ver eso, que pues todo mundo va por su playera del Grupo que le gusta o del género que le gusta. Entonces sí se abrió mucho el panorama, como te digo a todo esto de los géneros.

¿Qué significa para ti ser como este, como padre, con tu hermano de un tianguis tan importante? ¿O sea, cómo? ¿Nos interesa saber cómo? ¿Tu día a día como ha sido?

Pues es que imagínate, no, yo los, todos los tiempos del chopo siempre he asistido como intercambiador, como coleccionista, pero yo tengo 15 años que me jubilé y tengo como 12 años que regreso al chopo, pero vendiendo. Ahora soy vendedor coleccionista. Entonces imagínate para mí regresar al lugar que de alguna manera nosotros contribuimos a hacer. Pues es lo máximo para mí no es, es es mi vida no estar ahí. Llevando mi material, viendo amigos, llegan a mi puesto músicos. Entonces pues imagínate cómo me siento de gran satisfacción de regresar al tianguis del Chopo.

¿Qué crees que es lo que ha logrado que el chopo sobreviva durante tantos años y que a pesar de que ha pasado mucho tiempo y se ha diversificado mucho, nunca ha perdido su esencia? ¿Qué crees? ¿Lo que qué crees que es lo que hace que el chopo no haya perdido su esencia?

Después de tanto tiempo, principalmente eso que te digo, nosotros no teníamos este acceso a la música, no conocíamos los grupos, yo compraba 5 discos, de esos 5 discos conocía a uno, los otros cuatro no, pero ahora con toda la información que tienen los jóvenes de Internet, pues ya van a la segura, ¿no? Entonces yo creo que eso es bien importante, ya van, saben a lo que van a ir a comprar y lo que andan buscando no, porque pues ahí en el chopo van a encontrar todo, todo eso que andan buscando.

¿Tienes alguna anécdota favorita de del Chopo? ¿Algún momento favorito? ¿O quizás cuál crees tú que se haya sido el momento pico del tianguis del Chopo?

Bueno, dentro del Museo pues este… haber conocido a varios músicos, que en su momento yo, no se conocían mucho.

¿Podrías decir nombres, por favor?

Pues Batter Smith, este… early brain, Carlos Alvarado todo, todos los músicos de Chac Mool, entonces realmente llegar a conocer a esas gentes, pues fue bien importante para mí, y ahora que en el Chopo pues igual, ¿no? estos grupos extranjeros que vienen, Al tianguis del Chopo, porque aparte de que vienen a tocar, como que también es ya tradición que se dan una vuelta al chopo o darse un baño de pueblo a tomarse fotos con la gente, a firmar discos, entonces yo creo que este eso ha sido muy, muy padre.

¿Qué te gustaría? Pues obviamente, pues todos quisiéramos que el chopo continuara durante muchísimo tiempo. ¿Qué crees que se necesita para que el chopo continúe funcionando y para que la gente lo conozca más?

Pues este que sigan asistiendo más que nada, ¿no? Porque te digo, eso ha sido bien importante, que vayan ahora las nuevas generaciones, que sigan asistiendo nada más. Ahí van a encontrar de todo, ¿no? todo lo relacionado a la música y al rock principalmente, no, entonces yo creo que seguiremos muchos años más, ¿no? Porque ha sido bien importante ahí donde estamos, porque como que. Hay vecinos y a la vez no, porque está ahí una compañía de luz. Entonces no hay muchos vecinos, pero también el chopo ha contribuido a eso. Hemos tenido buena relación con los vecinos porque ha generado empleo. Sí hay gente que nos ayuda a poner las carpas, hay gente que las quita, hay gente que vende agua, hay gente. Entonces yo creo que el chopo ha estado en buena relación con los vecinos por lo mismo, porque ha generado también empleos.

Ok, y ¿Tú cuál crees que ha sido el factor que hace que, ahorita pues estamos en tu casa y que, y tienes una playera de rock, o sea, tu pared tapizada de posters y demás, o sea, lo que te hace amar tanto a la música?

Pues es eso. O sea, amo mucho la música, ha sido toda mi vida, mi, mi papá, músico, 2 hermanos Músicos. Entonces, y yo soy de la idea de que tenemos que enseñar lo que tenemos. Bueno, yo personalmente. Me gusta mucho compartir todo lo que tengo, mi memorabilia que tengo, mi colección. Entonces yo creo que eso es bien importante, ¿no? ¿Que la gente pues presuma sus cosas, ¿no? O sea, yo sí presumo mis cosas y pues accedí a que ustedes vinieran porque me dieron mucha confianza y pues aquí estamos, este… compartiendo.

De lo que vemos aquí. ¿Cuál dirías que es tu pieza favorita de las que están aquí? Esta pared.

Pues todas son mis piezas favoritas, pero principalmente puede ser el poster original de Avándaro. Yo, como yo les dije, no fui yo a Avándaro, pero tengo el póster original de Avándaro. Y este del Tiberios, que era una discoteca en Acapulco, es después de Avándaro y también es bien importante eso, porque estábamos mejores grupos en el momento. El ritual, Peace and Love, Three Souls in my Mind, Y todos los demás posters también son importantes para mí, pero yo creo que esos 2 son bien importantes y el huipil que que se le llama ahí, que venía en una caja de que se llamaba ofensiva POP. Y también es de colección, pero en general, pues todos mis posters, como como van a ver son de los setenta, son puros puros posters originales. Entonces pues todo, todo, todo me da gusto tener.

Y me da curiosidad, hoy en día se escucha mucho esto de que el rock está muriendo, que ya no se hace rock del bueno. ¿Qué opinas tú? ¿conoces algunas bandas actuales que te gustan o tú sí crees que el rock ya valió o tienes fe?

No, para nada, no, pues vean a caifanes, Café Tacuba. ¿Cuántos años tienen juntos? O sea, no, realmente el Rock nunca va a morir, eh, no, no creo, no creo, se reinventan, pero no, no va a morir.

La entrevista era un poco que nos contaras de tu vida, pues no personal, pero sí personal rodeando al chopo. ¿Hay algo que a ti se te ocurre que te gustaría comentar? No sé.

Lo que pasa es que aparte de los discos, he conseguido en el chopo muchas cosas,
¿no? revistas, libros, como podrán ver, pues tengo ahí muchas, muchas revistas de la época que fueron bien importantes en la historia. La historia del rock mexicana está en las revistas, la revista Pop Dimensión, México canta, piedra rodante, en todos los libros que tengo ahí, también de rock, entonces eso, eso ha sido todo, eso también lo he conseguido en el chopo, no nada más los discos tenemos que también decirlo, que conseguimos playeras, conseguimos libros, revistas, posters, volantes, entonces. Es todo mundo el chopo, no, nada más son los discos.

Recuerdo que ¿sabes qué? La semana pasada como que sentíamos mucho, que te molestaba, que no había mucho reconocimiento del chopo y que el chopo en parte sí ha crecido como para un lado medio negativo, algo, por ejemplo, decías de las drogas, de los que no son oficialmente vendedores del chopo. ¿Y pues tú qué opinas al respecto?

Bueno, pues es que lo de las drogas pues es difícil. Es un tema muy difícil, ¿no? pues ojalá con el tiempo desaparezca. Porque pues no, no nos pueden asociar con con esas personas, ¿no? Y la gente extraña que no son del chopo, pues también no llegará el momento en que que alguien diga hasta aquí ya, porque pues no es justo que nosotros tenemos 44 años y que alguien de la noche a la mañana ya esté ahí diciéndose que son del chopo, no, pero pues en su momento Alguien tendrá que poner un alto a eso.

Y nos enseñaste que aquí tienes estos. Los libros del chopo, ¿nos podrías enseñar?

Ah, sí, son los 3 libros que se han hecho sobre el chopo, ese lo hizo mi hermano Jorge Pantoja y este ese fue uno de los libros que hicieron del chopo. Este de Abraham ríos, que también es un compañero de ahí del tianguis del Chopo, es el segundo y el último es este, que lo hicieron unas muchachas de la UNAM, este fue el tercero y próximamente va a salir otro de yo creo para el otro año, el cuarto libro sobre el tianguis del Chopo.

Ese lo consultamos para nuestra investigación, de hecho, el último, sí. ¿Y que podemos encontrar en esos libros, aparte de lo que tú ya nos platicaste?

Pues fotos, fotos, principalmente fotos del del primer sábado. Teníamos, así como que el fotógrafo oficial Germán Gómez era así como el fotógrafo oficial del Tianguis, y ahí van a encontrar algunas fotos del primer sábado y de y de otros, porque pues acuérdense que el tianguis era. Este después del Museo, salió a la calle y después anduvo nómada por toda la ciudad, ¿no? por diferentes lados. Entonces aquí en los libros van a encontrar fotos de algunos lados en donde estuvo el tianguis.

¿Entonces, el primer día, sabías que esto iba a ser algo grande?

Sí, me han, me han hecho esa pregunta. ¿Tú sabías que iba a durar tanto? Le dije, no, la verdad no, pero no me sorprende que estemos aquí todavía a 40 años no, porque creo que no. Lo que nos ha unido ha sido la música.

¿Cuáles son algunos de los lugares aparte de pues obviamente el Museo y la calle donde están ahorita que más recuerdas donde haya estado el chopo?

¿Bueno, es que todos los lugares son importantes, ¿no? Un estacionamiento ahí en Sadi Carnot, y luego este… en, en el casco de Santo Tomás, en el quiosco de la Santa María, llegamos a ir hasta CU. Ahí, en la explanada de CU, el para ir por arquitectura, también llegamos a estar ahí en. Oyamel ahí por la raza también, entonces, pues para mí han sido bien importante todos los lugares en que ha estado y actualmente ahí en Aldama no que ya desde 1987, pues ya está ahí establecido.

¿Entonces, crees que de cierta forma el chopo es un retrato de México, además de un retrato del rock, que eso ya sabemos que es como un símbolo? ¿Crees cómo crees que el chopo representa a México?

Más que nada para los jóvenes ¿no?, es el lugar, es un lugar de jóvenes y Claro que, pues va mucha gente adulta también, ¿no? pero creo que eso es bien importante, que por eso ha durado tantos años porque ha sido un lugar de reunión. Principalmente de jóvenes. Entonces por eso yo creo que nadie los va a dejar morir.

¿Y por eso? ¿No te molesta que haya cambiado tanto y mutado hacia otras partes del rock o, por ejemplo, los skaters que luego conviven ahí? ¿eso no te molesta?

No, no, para nada. ¿O sea, te digo que es el tianguis del Chopo, es un lugar muy tolerante para para todas las expresiones, sí, principalmente de jóvenes, ¿no?

¿Qué le dirías a esta gente que piensa que el chopo es inseguro o que es peligroso?

Qué pues para nada, ¿no? Pues ahí yo creo que los 44 años nos avalan de que no, no hemos tenido ningún problema, no de aparte hay vigilancia, vigilancia de parte de los compañeros, vigilancia de policías, entonces pues para nada que es inseguro, no, hasta ahorita no, no ha habido nada.

¿Y qué dirías tú? ¿Y te ha enseñado a trabajar en el chopo?

La lección te digo que me me da mucho gusto, que me jubilo, y luego digo, bueno, ¿y ahora qué hago? ¿No? ¿Entonces dije, pues ah, pues voy a ponerme a vender cosas que me gustan, ¿no? ¿Entonces eso ha sido bien importante para mí, regresar al chopo ahora como vendedor, pero de algo que que me encanta y que me gusta, ¿no?

¿Qué es lo que has logrado ver ahora que ya eres vendedor? Que no veías cuando solamente ibas como coleccionista que digas, Ah, pues a lo mejor y esto yo no lo notaba, pero ahora que.

Soy vendedor, ya no sé, pues desgraciadamente pues nosotros los vendedores andamos buscando material que vender a la gente. Entonces desgraciadamente pues muchas veces vamos a comprar discos de gente que se enfermó, gente que murió, no, entonces, de algún coleccionista, ¿no? Entonces, pues ahora estamos como dices del otro lado. ¿Viendo la manera de conseguir material para para los jóvenes, principalmente, ¿no? Ahora, entonces, pues es muy, muy gratificante todo esto.

Te lo pregunté hace rato, por eso me gustaría saber específicamente ¿cuál tú crees que haya sido el pico del chopo?, su momento de más esplendor

Principalmente cuando. Antes de la pandemia, que, si llegamos a a reunir más de 5000, 6000 gentes, 7000 gentes. ¿Yo creo que ese fue el pico de del Chopo, no? Y ahora me da mucho gusto que después de la pandemia que dejamos de trabajar algunos sábados, pues la gente ha regresado. Entonces yo creo que volvemos a llegar a ese pico. Para mí volvemos a resurgir, pues te digo que ya después de la pandemia, pues la gente regresó y creo que se estamos en el segundo pico, porque en cuestión de asistencia, Miles de gentes, miles de gentes que llegan al chopo cada sábado.

Y ya para cerrar una última cosa. ¿Cómo tú, el papá del chopo, se lo le describirías a alguien que no tiene ni la más remota idea?

Es un paraíso, es un paraíso musical y te digo que no, nada más de discos, no playeras, botones este. De de todo, no, entonces para mí es el paraíso terrenal. Musical.

Ya, muchas gracias.

Gracias a ustedes, a ustedes.

 

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